Nov 28, 2006

spires that in the sunset rise

spires that in the sunset rise - this is fire (secret eye, 2006)

La música de estas cuatro norteamericanas -como dicen en el
tanned tin- es el rumor del aire en los árboles de un bosque plagado de duendes. Instrumentos caóticos ante los que más vale rendirse, cantos de sirena que hacen perder el rumbo... Todo vale para crear las cortinas de humo tras las que se esconden estas cuatro chicas procedentes de Chicago. Huidizas, misteriosas y sensuales como cuatro brujas preparando un aquelarre.


Magia, misticismo, oscuridad, sensualidad, libertad, caos, melancolía, espiritualidad... son muchos los adjetivos que se dan cita en las arpas, pianos, banjos, chelos y guitarras -por encima- de las de Chicago, por las que servidor no podía esperar.
Blues, wyrd- folk, el rock alemán más tentador y expansivo, ritmos deliberados y liberados en una ceremonia que es más sugerente y estimulante, 'Spike Fiddle Song' (!!!), prefieren susurrarte al oído antes de salir por la noche al bosque, algo ha cambiado, 'Sea Shanty', 'Clouds', 'Bee Forms' y el bonus que nunca se encontrará de 'First Utterance', 'Morning Song'. Entre el cielo y el infierno, allí esperan Kathleen Baird, Georgia Vallas y las hermanitas Taralie y Tracy Peterson, sigue por la senda oscura y las encontrarás invocando a la naturaleza.

5 comments:

ana said...

olé!

:)

ana said...

oló!

:->

Anonymous said...

alá!

mmm... ¡ñam!

Anonymous said...

:-)

y bueno el mejor disquito de la spires o no??, que rabia lo del tanned tin y leyendo las crónicas...

Oscar Casali Fuentes said...

Me intriga la propuesta musical de estas chicas. Habrá que correr el riesgo de caer en sus brujerías, sobre todo ante tan tentadora amalgama de instrumentos y estilos.

En un plano totalmente distinto, leyendo el comentario del Tanned Tin en cuanto a los actos comparables a la actitud temeraria de Spires That In The Sunset Rise, me hizo recordar un titular que salió en Chile hace poco en referencia a un nieto del General Prats asesinado en el gobierno militar que luego de hacer una larga cola como un pinochetista cualquiera, al llegar al féretro de Pinochet, le escupió en su rostro en medio de una horda de acérrimos partidarios del dictador que le rendían honores: "hay que ser muy cojonudo para pararse ahi y ser capaz de hacer tal acto"...en definitiva, este nieto logró salir ileso, un temerario ileso.

Saludos
Oscar